miércoles, 18 de junio de 2008
ni·Sen θi=nf·Sen θf
(Reflexión)
Hace tiempo se me brindó la oportunidad de acceder a información privilegiada. En su momento dudé de aprovechar la oportunidad o no hacerlo, y finalmente resolví en quedarme sólo con lo positivo del asunto: convertirme en simple espectador, aprender de lo que veía, callar y no mirar para nada lo negativo.
Gracias a ello aprendí muchísimo, conceptos que de otra manera jamás habría aprendido, unos positivos, otros negativos, pero globalmente todo fue bueno, porque al margen del carácter bondadoso o no de lo aprendido, el mero hecho de aprenderlo era una oportunidad irrepetible, porque de otro modo jamás habría sido posible.
Gracias a ello aprendí de las personas, también de mí mismo, llegué a conclusiones y pude predecir el camino propio y ajeno.
Y aunque suene a más de lo mismo, vuelve a pasar que ese poder conllevaba demasiada responsabilidad, se giró la tortilla y ahora se vuelve contra mí.
Saber tanto de forma ilícita me ha llevado ahora a la conclusión contraria: Antes me permitió comprender y decir "ah, entonces es por esto, ahora ya veo". Y me sentí bien.
Y ahora, a pesar de todo, comprendo cada vez menos.
Claudio ::
miércoles, 18 de junio de 2008 a las 12:09 a. m. ::

-------------------------------------